Por @arturtavera
Basado en una historia real
Mis manos comenzaban a temblar mientras seguía grabando la boda, habían pasado 15 minutos desde que había comenzado y el oficial civil de repente hacía alguna que otra broma con respecto al matrimonio, lo cual convertía la boda civil en toda una experiencia merecedora de ser tachada de una bucket list. Mis dedos comenzaban a resbalarse, pero se mantenían aferrados para ser cómplices de aquel evento especial de mis amigos y que debía ser recordado para la posteridad, tanto en la mente como en la memoria Micro SD de mi smartphone. Llegó el momento en que tomaron sus manos, se dijeron unos votos que les tomaron de imprevisto porque no los habían preparado y finalmente firmaron y se besaron. No aventamos arroz, pero si mucha felicidad y nuestros mejores deseos para el nuevo matrimonio. Llegando a la casa tendré que descargar el video porque casi se llenó mi celular.